Vida digna para los mexicanos

Posted by Michi.gon on 9:32

Mis chingones lectores recibimos una nota de nuestro colaborador JJFN quién también participa en la empresa hermana asociada a esta editorial michingonera: El Financiero.


Arte en la Marcha por la Paz


Después de concluida la marcha en el Zócalo de la Ciudad de México la consigna fue una: o el gobierno asume su primera responsabilidad que es brindar seguridad, protección y paz a sus ciudadanos o el siguiente paso es la resistencia civil. Miles acompañaron desde Cuernavaca hasta el Distrito Federal al poeta Javier Sicilia en su Marcha por la Paz: vida digna para los mexicanos. A la caminata y su protesta se sumaron activistas sociales como el padre de Alejandro Solalinde, coordinador del albergue para migrantes Hermanos del Camino, y el dirigente atenquense Ingacio del Valle, liberado hace poco tras permanecer preso en el penal de alta seguridad de Almoloya de Juárez. Para él, Sicilia pidió respeto, pues los machetes que enarbola el Frente de Pueblos enDefensa de la Tierra, dijo, no son armas ni balas, son una herramienta de trabajo para el campo con la que se quita la mala hierva. La Marcha por la Paz no estuvo exenta de arte. El sábado 7, en el receso que los marchistas hicieron en CIudad Universitaria, el compositor y director de orquesta Sergio Cárdenas ejecutó el conmovedor Réquiem de Mozart, en memoria de los caídos en los años recientes por la violencia y criminalidad imperantes en México. Estuvo a compañado por miembros de la Escuela Nacional de Música de la UNAM: La Orquesta Sinfónica; el Coro, preparado por Samuel Pascoe; y los solistas Viloeta Dávalos (soprano), Linda Saldaña (mezzosoprano), Alan Pingarrón. Cárdenas se suma, así, no sólo a los motivos e ideales de la Marcha por la Paz, sino que hace él mismo una protesta por la violencia y criminalidad que han sentado sus reales en su natal Tamaulipas [sólo en el municipio de San Fernando fueron hallados en abril 198 cadáveres]. Se calcula que las muertes violenta en México desde que se inició el sexenio de Felipe Calderón rondan los 40 mil. El índice más alto de asesinatos se da en los estados donde se desplegó a las Fuerzas Armadas y a policías federales, como nos señala el periodista José Reveles, hace unos días en las páginas de El Financiero. No está por demás señalar que la ONU considera genocidio cualquier acto perpetrado con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso (estos actos comprenden la muerte y lesión de la integridad física o moral de los miembros del grupo, así como su exterminio) y condena a los gobernantes, funcionarios o particulares ( y sus cómplices) que hayan asociado para cometer genocidio o que hayan instigado directa y públicamente a cometer genocidio.